sábado, 18 de octubre de 2008

CONGRESO DEL PP

Antes de nada quiero manifestar mi felicitación y enhorabuena a todos y a todas las militantes de este partido en un momento clave en la vida interna de una organización política que merece todo el respeto como es un congreso.
Sin embargo, no puedo dejar de valorar la intervención del reelegido Presidente del Partido Popular, Pedro Gordillo, en su discurso de clausura. Intervención que tuvo como única finalidad atacar al Gobierno socialista culpabilizándolo de todos los males económicos habidos y por haber.
Con su discurso, Gordillo demostró, además de un gran desconocimiento de la situación real de nuestro país y de la comunidad internacional, una gran irresponsabilidad e incapacidad para arrimar el hombro en momentos que requieren de todos nosotros, dejar a un lado los partidismos y aunar esfuerzos para dar soluciones, única forma de combatir la crisis como ha quedado patente con las acciones conjuntas y coordinadas que se están acometiendo en el marco internacional y que empiezan a dar sus frutos.
Desgraciadamente, Gordillo en particular y el PP en general no gustan de responsabilidades y desde luego no van a desaprobechar esta oportunidad, como ya hicieran con tantos otros temas que nunca antes habían sido usados como acicate político (terrorismo, por ejemplo), para meter el miedo en el cuerpo de la ciudadanía.
Gordillo usa y abusa del miedo tanto en su acción política como en su discurso, ya sea con las tesis entreguistas o como ahora, proclamando los peores augurios para los trabajadores y las familias españolas, responsabilizando de todo ello al Gobierno socialista. Obviando que las familias españolas tenemos un gran motivo para estar tranquilos en medio de esta crisis además de la solvencia de nuestro sistema financiero, el hecho de que a este Gobierno, si por algo se le reconoce, es por su atención a las políticas sociales de donde, ya ha anunciado, no se va a recortar ni un euro.

Pero además, es que la desfachatez del Presidente del PP no tiene parangón, Gordillo ha destacado en su discurso dos hechos como piedras angulares del PP que sin embargo, sólo han sido posibles con el concurso de los socialistas: la mejora de la situación económica y la atención a la españolidad y diversidad en la Ciudad Autónoma.
Me explico, cuando Gordillo habla en su discurso de buscar soluciones a la crisis económicas en nuestra ciudad, se refiere a ir a pedir ayuda a un gobierno socialista como es el de la Comunidad Andaluza; cuando Gordillo habla de demostración de españolidad, se refiere a la correspondencia de los caballas con los gestos irrenunciables promovidos por este Gobierno socialista como fueron las visitas de los Reyes de España y del Presidente del Gobierno. Esa es la realidad y ese es el papel que estamos jugando los socialistas en el desarrollo de nuestra ciudad, una labor de apoyo y atención constante y decidida silenciada y ocultada desde todos los estamentos y organismos en manos del PP.


Por último quiero hacer una breve reflexión sobre el uso de los símbolos que son de todos, como el himno de nuestra ciudad, que el Partido Popular devaluó usándolo de cierre en un acto interno como es un congreso político donde, desde luego, sólo está representada la ideología política de una parte de la sociedad ceutí.

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