SIN INTERPRETACIONES NI "ME HAN DICHO QUE DIJO", LEED LA ENTREVISTA CONCEDIDA AL "FARO" TRAS LA ASAMBLEA PARA SABER QUE OPINO Y PIENSO REALMENTE

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Escrito por Carmen Echarri:

Es la cara visible del PSOE o del nuevo PSOE como ahora ha dado por rebautizarse a un partido que, más que nunca, ayer demostró estar dividido. José Antonio Carracao, nuevo secretario general del partido, quiere partir de cero y anuncia que a partir de mañana la Ejecutiva que le acompaña planificará una hoja de ruta en la que entra, como punto principal, una reunión con UGT para mejorar las relaciones partido-sindicato.
En la primera entrevista que concede como secretario general y concedida a ‘El Faro’, Carracao posiciona sus bases y lamenta el espectáculo dado al final de la asamblea con el abandono de parte de los militantes y los gritos de ‘fascista’ contra su propio padre, el senador Carracao.
–Señor Carracao, ¿ahora qué?–(... sonríe)... ahora a trabajar. Mañana lunes tenemos la primera Ejecutiva convocada y creo que ahora toca eso. Tenemos dos direcciones en las que andar. Una hacia los intereses de los ceutíes porque nunca teníamos que haber apartado la mirada de ahí y durante este tiempo hemos cometido ese error desviándonos de esta parcela que es la más importante. La otra, trabajando de forma interna para cuanto antes normalizar la situación. El proceso ha servido para reconstituir el partido pero no asentarlo.Los compañeros que secundaban la candidatura alternativa, conociendo los resultados, no han permanecido en el salón y ese es un detalle que demuestra que tenemos que seguir trabajando y hacerlo con mucho esfuerzo, para unirnos todos, ampliar el partido en militantes con los compañeros que trajeron la ficha. Hay que trabajar mucho y decidido por normalizar la situación interna e imagen del partido.

–Tras la asamblea, además de esa clara división, se le han acercado militantes en principio críticos tendiéndote la mano para empezar desde cero y recuperar el partido... ¿Qué idea tiene de esta situación?–Hoy he puesto el cuentakilómetros a cero, en lo personal -a pesar de los momentos duros y difíciles en la propia asamblea- y en lo político. Esas personas que me han tendido la mano para trabajar en conjunto porque entienden que he sido elegido son bienvenidos. También pienso en los ex compañeros del partido que en el momento de abrirse la afiliación no vinieron con su ficha y a los que hay que ir a buscar, a reclamarles esa ficha... El PSOE de Ceuta, ya constituido, no puede pagar ese sobrepeaje dejándolos fuera.
–Y ante esas otras personas del ámbito crítico que, al final de la asamblea, han respondido con gritos de ‘esto no es democracia’ o ‘fascistas’, ¿qué les diría?, ¿qué opinión le merecen?–Si no lo habían hecho ya, ahora se han presentado en sociedad. Esto resume el sentir de este momento. Hemos gestionado esta situación de crisis, desde la comisión delegada, como creíamos que teníamos que hacerlo, incluso mediáticamente. Igual no ha sido la mejor solución, porque le hemos dado la oportunidad a ellos -por los críticos- de difundir un discurso único y lo que percibía la gente era sólo esa cuestión, esos argumentos. Nosotros podíamos haberlos contrarrestado con otras opiniones. No lo quisimos hacer porque esa estrategia mediática iba en detrimento de la propia imagen del partido. Ahora, con estas actitudes, si alguien no se había dado cuenta ya de quiénes eran estas personas, ahora, públicamente, los han descubierto.
–Habrán descubierto a quienes hasta el momento no daban la cara en sus críticas, difundiendo mensajes bajo el anonimato, porque hay otros rechazados -como el caso de Antonio Gil o Basilio Fernández- que sí han dado siempre la cara como divergentes... ahora llamados disciplinados.–Sí, Antonio y Basilio han dado la cara hasta cierto punto, porque recientemente he leído declaraciones en las que se decía que no entendían por qué se les había negado la militancia cuando lo único que había hecho era opinar (es el caso de Gil). No opinó, hizo mucho más, llevar el partido a los tribunales y la justicia le dijo que no tenía razón.Ciertamente el anonimato envalentona, es el parapeto en el que muchos cobardes se esconden. Lo hacen en los foros, en los blogs, incluso en el mío personal en el que he aceptado las entradas. Ha sido una actitud muy cobarde. Se ha confundido la indisciplina con la discrepancia. Por ejemplo, en el caso de Juan Hernández, que se ha reconocido discrepante, no ha habido ningún problema para que se le reconozca su militancia.La Federal tendrá que contestar a los compañeros que han sido rechazados, porque tiene que tener un motivo para adoptar esa decisión.
–¿Cómo le han sentado personalmente los insultos dirigidos a su ‘jefe’, el delegado del Gobierno, a Salvador de la Encina y a su padre a la salida del Tryp?–A estas personas les agradezco mucho que hayan estado. A Salvador, que creo que ha demostrado que le importa Ceuta, preocupándose por los intereses y aportando su experiencia en este proceso que le ha servido para entrar en la historia de este partido por méritos propios y el tiempo se encargará de juzgarlo. El delegado me ha demostrado su apoyo al equipo que ha salido democráticamente elegido de la asamblea y a mi padre, que ha estado allí, lo valoro. Que les digan a todos ellos insultos de este tipo demuestra que quienes los dicen no son las personas adecuadas para estar al frente de este partido. No pueden tener una responsabilidad orgánica porque a la primera de cambio tienen este tipo de actuaciones.Yo me he podido sentir violento en muchos casos o me ha podido no gustar decisiones tomadas, puedo incluso servir de recipiente donde verter todo ese odio que han ido generando durante el proceso... pero de ahí que insulten a personas que nada han tenido que ver en esta decisión... Ellos no han tenido ninguna intervención en todo esto. Personas así, que muestran esas maneras de actuar, que no son capaces de contener sus sentimientos no pueden tener responsabilidad, hay que ser mucho más equilibrado para estar al frente de una organización política.
–¿Es usted una marioneta manejada desde San Antonio, barriada en donde reside Toñi Palomo?–No voy a defenderme de eso, esas acusaciones no me crean ningún complejo. Nunca he tenido que renegar de nada de mi pasado, a pesar de las impresiones que se hayan querido dar. Agradezco mucho a Toñi que haya estado tanto tiempo trabajando por el partido, anteponiéndolo a otras cosas, aunque los resultados no nos acompañaron siendo todos los militantes los culpables de esa situación... y no tengo que defenderme de nada ni idear estrategia alguna para demostrar que eso no es así. Debo resaltar una Ejecutiva que he tenido la capacidad de elegir y en la que yo confío...
–... que tampoco se la han impuesto?–... no, no me la han impuesto, la he elegido yo porque si hubiera sido de otra manera no hubiera participado en el proceso. Nadie me ha puesto un nombre en la mesa.
–¿Entiendo que en la configuración de esa Ejecutiva ha podido provocar cierto malestar entre quienes querían formar parte de la misma...?–Sin duda. Hay compañeros que querían estar y han podido estar dolidos porque no consensuara con ellos las decisiones... pero debía ser yo, de forma autónoma, el que llamando uno por uno a los compañeros les pidiese que me acompañaran. Los compañeros que he elegido tienen la capacidad y la confianza y mi misma ilusión.
–... pues le va a costar que se deje de pensar, por parte de un sector, que usted ha ganado gracias a un pucherazo o llevando de apoyo a miembros de Juventudes Socialistas que, por cierto, también fueron acosados e increpados en la entrada del Tryp...–Le agradezco que me hable de Juventudes, porque son compañeros que han votado en conciencia... y han estado ahí no porque yo pensara que me iban a apoyar. De forma reconocida ha habido personas que me han dicho que no me daban ese apoyo. Creo que era de justicia que estuvieran dentro porque han demostrado, durante este proceso, su preocupación por el partido. Ha habido un control jurídico, porque si no no se podría haber hecho, y han estado allí, con el apoyo del secretario general Sergio Gutiérrez, que lo planteó en la Ejecutiva Federal. No había problemas jurídicos para decirles a estos compañeros que no podían acudir a votar como militantes. Nadie les ha presionado.
–¿Pucherazo?–No, no, niego la mayor. Si acepto que alguien me pueda afear algunas actitudes por ambas partes en el camino hasta la asamblea. Pero en el momento en que hemos pasado la puerta del salón del Tryp y hemos hecho el proceso, éste ha sido limpio y democrático, con control jurídico y con todas las posibilidades de que los compañeros que quisieran presentar candidatura lo hicieran. Hasta el punto de que, sobre la marcha, los candidatos buscábamos los avales y ha habido detalles en la que nosotros hemos ido más allá de lo escrupuloso. Ha venido una compañera, que estaba en el censo, y que no había participado en la asamblea. Cuando ya se había votado, pero la urna no estaba abierta, acudió y votó. Yo pedí encarecidamente que le dejaran votar a pesar de saber que no me apoyaba a mí. Los compañeros votaron y la candidatura que ha salido es justa. No puedo aceptar que se hable de pucherazo, de falta de democracia ni aceptar que compañeros se levantasen y se fuesen cuando no se había producido nada raro.
–En esa apreciación que me hace al destacar que en este camino ha habido algunas actitudes feas... ¿se está refiriendo al rechazo de militantes históricos?–No, en este caso es la Ejecutiva la que tiene que tener sus motivos. Pero con todo, este partido que nace es un partido nuevo, bien arraigado, que tiene la capacidad de ser generoso, pasado un tiempo, esas heridas que no están cerradas, pueden cicatrizar y nunca nos separarán más allá porque en la parte ideológica no hay diferencias, seguro. Sé que no hay niveles de socialistas, puede que los haya de compromiso y disciplina, que no es mala.
–Usted sabe que el PSOE arrastra heridas que van más allá de este proceso y que superan a la misma Palomo... y todavía no se han curado.–Ahora mismo dentro del partido sólo queda un secretario general -en alusión a Palomo- y eso dice poco de cómo se han hecho las cosas. Nosotros no simbolizamos el pasado sino el futuro y tenemos la idea de que esto sea un partido distinto. Agradezco lo que se ha hecho, pero ahora somos otros, y el partido tiene futuro en Ceuta porque crea ilusión y eso lo hemos visto en las elecciones generales y ahora debemos trasladarlo a nivel local.
–Es un tiro directo al Grupo Parlamentario con el que deben afianzar las relaciones, más si cabe cuando la portavoz Ramírez ha mostrado públicamente su solidaridad con los rechazados, cuestionando esa actuación. ¿Entiendo que puede haber una discrepancia entre ustedes, son relaciones difíciles?–No va a ser nada difícil. Yo personalmente me llevo muy bien con Inmaculada, es una persona que tiene su propio criterio, pero lo único que le mueve es el interés del PSOE. Ahora va a tener un partido que le apoya en una gestión que es ardua y difícil que ella sí asumió y que otros no quisieron asumir. Y no me refiero a los que ya lo gestionaron y decidieron no seguir, me refiero a otros compañeros que estaban antes de ella...
–... ¿Gonzalo Sanz?–... (calla, silencio...)... son compañeros que tuvieron la oportunidad de decir ‘me sacrifico por mi partido, doy la cara y me quemo’... pero no, decidieron no quemarse. Esos mismos, quizás, ahora han avalado con su persona propuestas alternativas que han ido a buscar la confrontación rozando el insulto y descalificando diciendo, por ejemplo, que yo no tenía madurez política para asumir este papel. La madurez la da la capacidad de tomar decisiones y la de tomar responsabilidades. Yo lo he hecho cuando el partido me lo ha pedido, como en las elecciones generales con un PSOE disuelto, condenado a otro descalabro y tuvimos la suerte de no ser así porque los ceutíes quisieron darnos el apoyo.
–¿Qué relación piensa usted tener con entes, partidos o asociaciones con las que las relaciones no son buenas? Le hablo por ejemplo de UGT, que se ha posicionado como integrante del Foro por la Izquierda, crítico con la dirección socialista actual.–Lo primero que haremos mañana la Ejecutiva es marcar una hoja de ruta, que nos haga recuperar el partido. Ir a las barriadas, a hablar con los presidentes, ir al Príncipe, que nos ha dado un apoyo en las generales, por eso tiene que ser la primera barriada a la que acudamos. También tenemos que ofrecernos al sindicato hermano UGT. Es importante que el PSOE tenga un diálogo fluido con este sindicato...
–¿Con su secretario general?–Sí...
–¿... pero si lo han rechazado como militante...?–Tenemos que ir a hablar con UGT y todos los sindicatos, aunque con el primero de manera prioritaria. Estoy dispuesto a separar cualquier problema que puede haber con las dos figuras que en este momento gestionan los intereses de las organizaciones (UGT y CCOO) y decirles que el PSOE necesita al sindicato. En nuestros Estatutos decimos que recomendamos a UGT como sindicato. El secretario general, que a la par era militante del partido, ha podido tener una dicotomía que le ha podido llevar a cometer errores al tener pronunciamientos mediáticos que han ido contra el partido. En esta nueva etapa en la que él no está como militante, puede marcar una distancia para tener un diálogo partido-sindicato, sindicato-partido. Esa es mi voluntad y eso es lo que le voy a proponer. Otra cosa será la capacidad que él tenga para entender esta situación como yo la planteo.

–¿Y con UDCE-IU con la que han mantenido un acuerdo en las generales?, ¿qué plan tiene?–Con los partidos en la oposición siempre hemos tenido sintonía, nos acompañan en las mociones... hay una raíz cercana que nos lleva a estar con políticas de izquierda. En ese camino debemos seguir trabajando, si tenemos coincidencias en las propuestas que llevemos a pleno nos apoyaremos.
–¿Entiendo que habrá acuerdos puntuales pero no más allá...pactos políticos, unidad de izquierdas?–No tengo problema en hablar abiertamente. Cuando se habla de la unidad de la izquierda, nosotros decimos que todo aquel que se sienta de izquierdas y quiera estar en el PSOE pues puede hacerlo. Pero ése no es el planteamiento que nos quieren hacer. Quieren que el PSOE sea un recipiente de siglas, que se usen a las siglas como marca para tener una repercusión mayor... eso no es posible, porque nos separan muchas otras cuestiones.
–¿Está la izquierda amenazada por personas que sólo buscan intereses?–No, creo que quienes se declaran de izquierdas es porque lo sienten. En una ciudad en donde el PP tiene una mayoría tan abrumadora y con comportamientos difíciles, declararse de izquierdas no es plato de buen gusto porque demuestra que son personas valientes.
-Cómo están ustedes de divididos y con el espectáculo que dan... ¿saben que están dándole votos a la derecha y que igual hasta Juan Vivas piensa en retirarse en favor de Gordillo asegurándose, sin duda, otra mayoría?–... pues creo que Juan Vivas debería preocuparse más que jubilarse. El PSOE nace hoy otra vez y va a trabajar por los intereses de los ceutíes y eso lo van a ver los ciudadanos.
–Oiga señor Carracao, usted dice que quiere mucho a Ceuta pero tiene su puesto laboral asegurado en Algeciras... ¿cómo se come eso?–Es cierto. Como cualquier joven, en mi periodo de excedencia, me preparé para unas oposiciones. Uno sabe que en la política tiene un periodo. En el momento en que los ciudadanos no quieran que esté tendré que irme. Con esa concepción debo buscarme una salida laboral, al perder el puesto laboral que tenía en FEAPS. Me puse a opositar como cualquier joven. Si lo hacía en Ceuta lo iba a tener muy difícil porque comprobamos cómo las oposiciones para funcionario municipal están siempre bajo sospecha. Creo que he buscado una salida laboral legítima. Si una persona busca un trabajo en Algeciras y reside en San Roque, nadie lo resalta. Sin embargo en Ceuta, en donde siempre hablamos de la españolidad, alguien busca echar en cara este hecho.

–¿Merece la pena todo esto?–Me lo pregunto muchas veces. Me lo he preguntado hoy, en la asamblea. Incluso la sensación que queda después de los resultados no es de una alegría desbordante. No lo sé. Quiero que cuando pase esto, espero pensar que ha merecido la pena. Yo, al menos, voy a trabajar con mucha ilusión.
–Mañana empieza el trabajo, con su equipo, y con un delegado que, al menos, no le dice que es un crack...–... yo le agradecí a Jenaro aquellas declaraciones, pero no me gustaron porque no son ciertas. Soy una persona pudorosa y esas manifestaciones no me gustaron porque las llevo francamente mal.Este delegado no me ha dicho que sea un crack, lo que le agradezco, pero sé que tiene una confianza en mí, personal y política que le ha hecho tener una actitud pulcra en todo lo que concierne al partido.Puedo seguir de asesor del delegado, que va a encontrar en mi a una persona que pueda intentar que los apoyos que nos dan a nivel nacional tengan su visualización, que se vea lo que hace el Gobierno socialista de España por Ceuta y los ceutíes para que no se lo apropie nadie. Ni el delegado ni yo vamos a permitir que los intereses del partido y de la Delegación se confronten. En esto coincidimos.
–¿Ese PSOE que ahora vuelve a nacer... es racista? Se lo pregunto a tenor de la carta remitida por algunos musulmanes al Congreso de los Diputados denunciando este extremo.–Eso forma parte de la campaña promovida, buscada e intencionada. No se le puede achacar al PSOE un comportamiento racista. No sólo en Ceuta porque se recuerde el tema de que el partido le dio derechos a los que los tenían. No es así. Las personas que han pedido su entrada en el partido serán estudiadas y analizadas.
–Resúmame la asamblea.–Ha sido una asamblea de contradicciones, en los sentimientos personales, en los discursos que han defendido algunos y las decisiones que luego han tomado... Lo ha sido de contradicciones pero ha dado como resultado un proceso limpio y democrático en el que los militantes han dado salida a un partido nuevo, bien arraigado que sabe hacia dónde tiene que ir.